martes, 19 de enero de 2016

Jurisdicción Social

JURISDICCIÓN SOCIAL


No pensé caer tan bajo 
en la cuestión del trabajo.
Sólo funciona la Inspección 
cuando falta la recaudación.
En la Seguridad Social estoy de alta,
la empresa no tiene falta.
Pero si lo que falta es el jornal 
que vayan a Jurisdicción Social, 
y entre pleito y abogado 
te quedas sin lo sudado.

El pobre jornalero 
se quedó sin su dinero, 
el jeta del empresario 
me tomó por voluntario,
para el negro y el emigrante 
con los papeles es bastante.

De todos es sabido
que en VELATE había bandidos 
que atracaban en el puerto 
y dejaban medio muerto 
al peregrino despistado 
y aquel que no iba armado.

Pero aquel feroz bandido 
ya está reconvertido, 
antes salía de la maleza, 
ahora están en la LIMPIEZA.
Pero es al mismo personal 
a quien roba el jornal.

Después de un trabajo duro 
sin respirar aire puro,
polvo y pintura tragando 
los pulmones se van cargando,
en un tubo encerrados 
entrando agazapados,
con ese olor a disolvente
que marea a mucha gente.

Reclamé aire de una manguera 
para que allí uno no muera,
pero ponen un ventilador 
para remover el calor.

Pero entre tanto esclavo
salió un navarro bravo
que por la seguridad pelea
mientras el negro se escaquea.
No quiero esta ventilación
sino aire nuevo a presión.
Le respondió la encargado:
Su trabajo ha terminado,
no vuelva usted mañana, 
se acabó su semana.

Esperando un tiempo a cobrar
no empecé a reclamar 
los siete euros, lo hablado
por cien horas que he trabajado.

Un mes con lapos en la garganta
este oficio ya me espanta.
Pero este trabajo inhumano
parece que ha sido en vano.

Además de este mal trato
nunca firman un contrato,
tampoco dan el finiquito.
Son ladrones, lo repito.

La paciencia tiene un techo
cuando se pisa el derecho.
Porque no quieren pagar 
tras un año de esperar
ya me pongo a denunciar,
y la justicia te quiere marear.

Pero me la tomaré por mi mano
porque el tramite legal es vano.
Y no me arrepiento
si doy un escarmiento
lo digo yo que nunca miento.

Que solo pierde la razón
el que ya tenía la razón.
Y tras tanto pareado
también yo estoy cansado.

Pido al Padre Eterno en su Justicia
que castigue esta injusticia,
y si en cuarenta días no ha obrado
sea yo el encargado.



Anexo:
Termino ya por conclusión
con el poder de la oración:
Luego que al Padre Eterno he mentado 
ya en mi cuenta han ingresado.
Lo agradezco como buen cristiano
pues solo he empleado la mano 
para escribir este poema ya terminado.
Pero sin subsidio me he quedado.



















No hay comentarios:

Publicar un comentario